Esta vez hemos hecho un viaje en automóvil algo más largo de lo habitual, para hacer la ruta que San Josemaría Escrivá de Balaguer tuvo que realizar a finales del año 1937 para salir de la zona republicana hacia Andorra, y de allí ir a la otra zona en la que tendría posibilidad de atender a muchos de sus hijos del Opus Dei sin riesgo para su vida.
Bien sabemos que su huida de la zona en la que la religión católica era perseguida a la otra se hizo con dolor, ya que quedaban algunos de sus hijos en la zona republicana y su amor de padre tenía el corazón dividido.
En el primer tramo es en el que pidió, en su angustia paternal, una señal... y al amanecer de aquel día, en las ruinas de la Iglesia de Pallerols encontró una rosa de madera que fue la señal que le confirmó la decisión del paso. Aquella rosa, la rosa de Rialp, es una señal fundamental para la vida del Fundador del Opus Dei y para toda la Obra, señaló un camino y con el camino una decisión, dolorosa, pero ya firme de pasar los Pirineos.
En nuestro caso, esta etapa, ver mapa de la ruta en este enlace, se hizo después de hacer el recorrido de la Cova del Corp al Barranco de la Ribalera. Andábamos con el tiempo justo y era preferible utilizar las cuatro horas de la mañana para ese segundo itinerario.
Por la tarde estuvimos en la Iglesia de Pallerols, con los apuntes del Paso del Pirineo de Don Pedro Casciaro, que leímos en el “horno”, una especie de estancia circular encima de la Sacristía de la Iglesia, que sirvió de dormitorio una noche, la noche de la Rosa de Rialp. Después bajamos a la Iglesia. Vimos el espacio en el que estaba la casa rectoral que por estar en estado ruinoso, se tuvo que derribar, y fuimos a la Cabaña de San Rafael.
Durante el camino nos cayó una tormenta que impidió completar el reportaje fotográfico, pero estuve ahí, viendo los restos de la cabaña y al lado de Mosén Ignaci Fábregat, que ha sido quien ha impulsado tanto las restauraciones como la señalización de este itinerario.
Tardamos en hacer el itinerario como unos cuarenta minutos ida y vuelta, eso sí, bien mojados por la tormenta. El recorrido entre campos, carrascas y pinos muestra que la Cabaña estaba bien emboscada. Ahí pasaron varios días antes de iniciar el paso.
frid
Web recomendada: Asociación de amigos del Paso de los Pirineos (Versión catalana o castellana)
Explicando el itinerario del Paso de los Pirineos. Estamos en el lugar donde se ubicaba la casa rectoral.
Con ropa seca y de vuelta, saliendo de la Escuela de la Rectoría.
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