Saliendo de Rialb y yendo al camino de la Masía de Vilardell podemos contemplar el roble milenario propiedad de la familia Vilardell. Magnífico ejemplar que no puedes dejar de admirar.
Desde la Masía, por un camino que va subiendo los campos de la masía, llegamos a la pista forestal, pero casi inmediatamente, en la curva, nos metemos en una senda que nos subirá directamente al Refugio si no nos quedamos retozando comiendo arándanos.
Desde el refugio, ya por la pista, nos acercamos al camino que sube el Balandrau, por el que podemos bajar a Serrat. Nosotros, al llegar a la conducción de agua, seguimos esa pista que nos lleva al mismo sitio y, además, como es habitual, somos los primeros en pasar por ella este año.
La pista va desembocando en distintas vergas que hay que volver a cerrar una vez pasemos por ellas.
Magníficas vistas de los servales, de los pinos y prados, incluso alguna lagartija (en Serrat) nos deja que la fotografiemos.
Desde Serrat volvemos a Rialp por Fustanya.
Volvemos a Rialp después de tres horas de andar.
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